domingo, 11 de agosto de 2013

Versos sueltos..


 
                           Te voy a entregar la fragancia de mi piel     
                            para que te quedes a orillas de mis besos...



Alasblancas♥

Esas rosas rojas (acróstico)Te Amo y Te

Silvia Mirta Silva Vallejos
23 de Julio
Esas rosas rojas (acróstico)Te Amo y Te Odio.

Te ame desde el día que te vi.

En el silencio de la noche te soñé.

Amanecí toda llena de amor,

Mas un día me heriste el corazón.

Osado te portaste conmigo,

Yo que te daba hasta mi vida,

Te voy a pedir que no me dejes más.

Esas rosas rojas color sangre...

Oh, sólo llévalas a mi tumba

Donde ahora me encontrarás

Instalada por tanto dolor que me diste.

Oh amor, hoy sólo es odio lo que llevo dentro...

Alasblancas♥


Se reserva los derechos de autor.

Una noche interminable…

La noche se iba acercando y Marina acostumbraba a cerrar todos los ventanales y poner llave en los pórticos. Como todas las noches se acercó a las ventanas y se puso a ver que todo esté cerrado, de repente vio una sombra que paso muy rápidamente y ella dice: -¿Alejandro sos vos?- y nadie le respondía, entonces sintió un escalofrío que le recorrió por toda la espalda, pero ella era una mujer muy fuerte y siguió hacia la otra ventana, pero le quedó en la cabeza la sombra que había visto pasar. Terminó de cerrar todo y camino hacia la cocina, apagó la luz y se dirigió hacia las escaleras donde estaban los dormitorios de los chicos. A la mañana siguiente levantó a los niños, preparó el desayuno, le acomodo la corbata a su esposo y los despidió. Ella tenía que pasar por la tintorería y comprar unos víveres para la cena. Era viernes, siempre se juntaban dos parejas de amigos que dividían los viernes en casas distintas. Tras un arduo día llego la noche, ya tenía la mesa puesta y la chica que la ayudaba había dejado todo limpio y algunos detalles hasta que Marina se cambiara de ropa. Los chicos dormían en lo de su abuela… Llegaron las visitas, cenaron, charlaron de distintos temas y cuando una de las amigas, Elena, le dice: -Ya vuelvo, paso al baño- -Si, pasa tranquila- le respondió Marina. La charla siguió, pero Marina se preocupó al ver que tardaba tanto. La miro a Lucía y decidieron subir a ver qué pasaba, golpearon en el baño, insistieron y no pasaba nada, entonces ya muy preocupada abrió la puerta y dio un grito que estremeció toda la casa. Lucía la sostuvo, era Elena yacía colgada de una soga y otra vez vio la sombra que cruzó, pero Lucía no había visto nada. En un momento todos subieron y dijo el esposo de Marina: -No toquen nada-, y llamo a la policía, denunciando lo que había pasado. El esposo de Elena estaba shockeado, no podía recuperarse. Se llevaron el cuerpo después de muchas preguntas y de sacar huellas. Al otro día lo ocurrido fue el comentario de todo el barrio, nadie lo podía creer. Marina despertó y quería que todo esto fuera un mal sueño, bajo a tomar un café, los niños se habían quedado en casa de su abuela y el silencio de la casa la apabullaba. Cuando de pronto, levanta su mirada y ve pasar a la sombra, entonces la sigue y se dijo a si misma: -Loca no estoy- y siguió hasta el living. Logra ver a la sombra y ésta la mira casi de costado y se pierde en la pared, ella temblando sale corriendo de la casa y la busca a Lucía, que era su amiga más fiel, y le cuenta lo sucedido, entonces Lucía le dice: -¿Estás segura?- -Si te digo que se perdió por la pared, ¿Me crees? Loca no estoy- Lucía le contesta: -¡No amiga!, vamos a tu casa a investigar.- Llegaron con mucho miedo y pasaron al living, se acercaron a la pared y había una gran mancha, como la silueta de una persona. Marina dice: -¡Mirá, tocá la pared!-, cuando de pronto ante sus ojos, la sombra toma a Marina y se pierde en la pared, Lucía atónita quedo paralizada, pasaron horas hasta que llegó el marido de Marina y Lucía seguía en el mismo lugar. Alejandro le gritaba: -¡Lucía!, ¿Qué pasó?- pero ella no respondía, -¿Dónde está mi esposa?- Lucía seguía sin contestar y Alejandro la toma del brazo y ve que estaba dura, pálida, sin poder hablar. Llamó al médico y la internaron, pero Lucía no se recuperaba, tan sólo balbuceaba: -Se la llevó por la pared…- Tras pasar un tiempo Marina jamás apareció, Lucía quedo internada en un lugar de recuperación mental y su familia se mudó del barrio. La casa de Marina fue puesta en venta pero nadie quería comprarla, porque según los vecinos, decían que en la pared quedó la mancha de una mujer como pidiendo a gritos: ¡Por favor, ayúdenme!

Alasblancas


domingo, 21 de abril de 2013

UN BOLETO DE REGALO.


 Tras una invitación Guadalupe llegó a Londres donde la esperaría Harry.
Él, un cantante muy popular. Ella una argentina que vivía en un punto del norte, soñadora, leía todo sobre él y lo seguía en cada canción nueva que salía.
Un día se realizó un concurso para conocerlo y la joven, Guadalupe, hizo una carta. Nunca se imaginó que a los meses desde Londres le llagaría buenas noticias. La carta decía:
“Estimada señorita Guadalupe, le comunicamos que se le enviará los pasajes y tendrá pagada una estadía por tres días en el hotel Westbury”.
Ella pegó un grito y su madre no sabía que pasaba, corrió hacia la puerta y le dijo:
-¿Hija que pasa?-
-¡Mami me gane un viaje!, por dios no lo puedo creer muero de amor por ese chico.
La madre, ya no podía hacer nada, solo acompañarla con su corazón.
Llegó el día tan esperado, viajó hacia Buenos Aires y del aeropuerto salió rumbo a Londres. Todo fue tan increíble como si fuese un sueño de hadas, la llevaron, la dejaron en el hotel, la atendieron con toda delicadeza. Ella solo soñaba con ese día.
Por la mañana tomó el desayuno, la llevaron de paseo por el reloj más famoso llamado Big Ben, recorrieron la ciudad y volvió al hotel, donde la esperaban unas personas.
Le comunicaron que le traerían un vestido y la maquillarían, ya que por la noche tendría una cena con Harry.
Así fue que le dejaron un vestido azul fascinante, la maquillaron muy suave, ya con su juventud era suficiente.
Ya estaba lista y súper nerviosa, la llevaron al salón y tomó asiento en la mesa que ya estaba reservada para ella y Harry. Se trataría de una cena romántica con velas, un lugar maravilloso con una luz tenue.
Guadalupe tenía su corazón agitado y alguien por detrás le toca su bella cabellera que llegaba hasta su cintura.
-Largo y lindo cabello, casi azabache- le dijo, y ella murió de amor, se dio vuelta y lo abrazo sin pensar. El reía y con su apenas castellano le dijo:
-Niña eres muy bella-
Charlaron comieron y hasta un beso le robo él junto a una hermosa fuente que dejaba ver las estrellas.
Como todo tiene un final el zapatito no se perdió pero el reloj tocó las doce y él se tenía que ir.
Guadalupe corrió a sus aposentos y lloró porque no sabía si era bueno o malo lo que había vivido, ya que nunca más lo vería, ni besaría sus labios.
Al día siguiente ya sus maletas estaban preparadas un taxi la esperaba para llevarla hacia el aeropuerto, un viaje largo la esperaba. Llegando a Buenos Aires se dirigió al tren que la llevaría hacia su provincia, donde ya los sueños solo vivían en su corazón.
El tren viajaba lento como observando el paisaje, tras la ventanilla su rostro reflejaba el dolor, tanto que comenzaron a rodar lágrimas por sus mejillas.
El sueño llegó a su fin...

miércoles, 27 de marzo de 2013

Una y mil veces


Nos encontramos en el hotel de siempre, sólo para pelear una vez más.
Y aunque te amo con locura sé que tengo que partir, doy vuelta las cartas esas que una vez las barajaste tú.
Siempre con tu canto de sirenas en mis oídos que me dejó grabado tu mar.
Y ahora ya no queda más que llanto por las mañanas, ya no puedo reír, recojo mis pedazos y sigo caminando por esta calle de tierra dejando mis lágrimas caer.
Mi vida ya está terminada sin vos, ¡No lo puedo creer que tengo que seguir otra vez a solas sin ti!
Desencanto que me puso la vida, ¡que dolor!, es como un puñal que atraviesa mi cuerpo.
Ya no tengo nada, ninguno de los dos tiene la culpa. Solo es un juego de la vida y ya no puedo seguir luchando.
He caído por ti una y mil veces en este dolor.
Ahora, ya no te voy a tener piedad. Adiós…


Alasblancas♥

miércoles, 20 de febrero de 2013

Y si fuera amor...?


…Y si fuera amor...?





Ariadna, ese verano decidió salir de vacaciones, acomodo sus cosas en la casa, le pido a su madre que fuera a regar sus plantas y a darle de comer a su pequeña gata llamada Luz. Sólo serían quince días y todavía no sabía a donde se iría, ni que la vida le tenía preparada una sorpresa.
Entró a Internet a ver a donde podría ir y entonces vió una playa soñada y dijo:
-Acá me voy. ¡Me voy a México!-
Preparó su bikini, una pequeña maleta y se dispuso a vivir sus vacaciones.
Tomó el vuelo de la seis y junto a ella un caballero muy apuesto que le sonrío le preguntó:
-¿Te vas de trabajo o de vacaciones?-
Ella le respondió:
-Me voy de vacaciones-
Él simpáticamente le dice:
-¡Pero qué sorpresa tan linda! Yo también-
Mantuvieron una charla, hablando sobre dónde se hospedarían y que seria placentero tomar algo juntos en la playa de Acapulco.
Ariadna, dentro de ella, se preguntaba:
-¿Será casado? ¿Tendrá novia?-.
Él le había caído muy bien a ella…
Pasó el tiempo, llegó el avión a su destino.
Cada uno se despidió, pero soñando con ese encuentro.
Ariadna lo volvió a encontrar en el lobby del hotel, charlaron y comenzó un romance.
Ella se dijo:
-¡Esto será un romance de verano-
Pasaron los días, playa, baile, besos terminados en la arena despertándolos un sol abrasador,
Nunca fue tan feliz, pero los días terminaban, ella se fue primera que él. Él se quedo unos días más pero prometió llamarla…
Ariadna incrédula dijo:
-¡Listo!, Acá se termino todo-
A medida que pasaban los días, ella ya volvió a su ritmo vorágine de buenos aires, su trabajo, su casa, su madre, la cuál le reprochaba por no tener ni el teléfono de ese desconocido, sin imaginar lo que vivió con el, sino jamás la perdonaría.
Ella le decía:
-Madre, le dí el mío, él podría llamarme- y se quedaba callada.
Una mañana suena el teléfono, del otro lado escucha una voz tan varonil que le pregunta:
“-¿Y si fiera amor?”-
Entonces a ella se le llenaron los ojos de lágrimas y le responde:
-¡Claro que si!. Yo se que es amor-
De ese encuentro tan fugaz nació algo tan increíblemente bello: ¡El amor









Tu Partida



Cuento Nº 10: Tu partida...





Van cayendo gotitas que corren por el ventanal, tengo tanto dolor que mis lágrimas se confunden con la sangre que dejaste en el piso.
-¿Qué hiciste?-
Nunca dejaste que te amara, ella te quito el aliento, te llevo a la locura de matarte y acá estoy yo llorando un río, de lágrimas por alguien que solo me miró como su amiga.
Por las tardes te sentabas y me contabas tantas historias de ella. La pusiste en un altar.
Pero si me la imaginaba con el cabello negro, su vestido casi transparente, volviéndote loco, en el desván donde fue tuya una vez.
La playa donde las rocas mojaban sus cuerpos…
Una despedida, un altar que tu nunca compartiste, vestido blanco, brindis y llanto.
Y ahora te tengo en mis brazos, cierro tus ojos, beso tus labios y te vas a un mundo en el cual ninguna de las dos estaremos

Cuento Nº 1: Desconcierto...




Alicia caminó hacia el río, preparo la canoa. Era una tarde de otoño pero con un sol  tibio, entonces decidió salir río abajo a pasear un rato.
Se puso un chaleco, tomo algunos recaudos y se encamino a navegar. Ya alejada de la orilla, a lo lejos por el horizonte,  ve a un hombre que gritaba desde el otro lado. Ella preocupada se encamina hacia él, con uno de los remos toca el muelle y le pregunta, muy preocupada:
¿Qué le pasa?
Y el hombre se encontraba pálido y con mucho dolor en su rostro.
Ella le pregunta:
-¿Necesita algo? ¿Lo puedo ayudar?
Y él le comenta:
-A mi esposa le comenzó a salir unas  gotitas  de sangre  y  pensé que era una cosa de nada. Tal vez era por el sol de la tarde, pero ya no paraba y ella se desmayo en mis brazos. ¡Estoy muy mal! Imagínese…salí a buscar el bote y en el apuro se me cayó sobre un yunque y se averió.
Por dios…señora, ¿me podría llevar hasta la otra orilla a un médico?-
Alicia no dudo, lo que parecía una tarde de otoño increíble se había tornado algo espantoso. Ayudó al hombre a cargar a su esposa y partieron hacia la otra orilla.
Ya llegando, una amiga la esperaba en el muelle, la ayudó, tomaron una camioneta y se marcharon hacia el hospital…
Alicia no podía creer todo lo que estaba pasando, era como un sueño, un mal sueño… ¡Pobre mujer! No despertaba.
Después de un rato llegaron al lugar, bajaron a la señora en una camilla y la llevaron hacia adentro.
Ella muy nerviosa y su amiga que no paraba de hacerle preguntas; ella aturdida le comenta rápido lo que sucedió.
Pasaron unas horas y salió el hombre el cual la señalaba a Alicia  y ella lo miraba sin entender que pasaba.
El médico se acerca y le dice:
-Señora tendremos que denunciar lo que paso.-
Ella sin problema le dice:
-Claro, no tengo drama.-
Pero nunca pensó que ese hombre había tramado un monstruoso plan…
Camino hacia la comisaría le preguntó al médico:
-Disculpe… ¿Que tengo que decir? porque la verdad es muy poco lo que vi…-
A lo que el médico le responde:
¿Como lo que vio? Usted fue quien lastimó a la señora. Le comunico que la mujer está muerta, fue una pelea por su amante.-
Ella aturdida le dice:
-¡Eso no es verdad!-
Y le cuenta lo que en realidad pasó.
El médico la entrega a la policía y le dice:
-Todas las amantes celosas dicen lo mismo…-
Su amiga la siguió y le dijo:
-¿Por qué nunca me contaste que ese era tu amante? ¡Pobre tu marido cuando se entere!...-
Y Alicia simplemente se puso a llorar, se dirigió hacia la puerta y sintió como si un rayo le partiera en dos el corazón.
No podía creer lo que estaba viviendo, ni lo que le esperaría después por ayudar a un desconocido…




La esperanza que no fue

Segundo Lugar en Ronda 7 Cuentos Cortos
Cuento Nº7: La esperanza que no fue… de Silvia Mirta

Ella leía un libro mientras la tarde se iba poniendo gris. De pronto, se fue acercando hacia la ventana y a lo lejos, casi cerca del portón de entrada, pudo ver las luces de un auto.
Alguien bajaba con una maleta, reconoció a un hombre alto con un tapado y un sombrero antiguo. Se fue acercando cada vez más por el camino y preguntó:
-Disculpe… ¿A quién busca?-
Él sorprendido respondió:
-¡Buenas tardes señora!, estoy buscando a María Eugenia-
Ella le responde:
-Soy yo-. Aunque por dentro se preguntaba quién era éste señor y para qué la buscaba.
La tarde se perdía entre un gris oscuro y el sol por el horizonte, el cual no la dejaba verlo muy bien. Siguió unos cuantos pasos y él se saca su sombrero y ella se queda tiesa, le corrió una ráfaga de viento por su cuerpo que le levantó su falda y no atinó ni a bajarla. Él se ríe y le dice:
-¿Ahora te acuerdas de mí?-. Era Ignacio su primer novio, al cual hacía tiempo que no veía.
Lo invito a pasar y mantuvieron una larga charla. Él le comentó que estaba trabajando en unas cobranzas cerca de su casa y entonces decidió pasar a verla.
Ella le dijo:
-¡Hiciste bien!, estoy tan sola en este caserón desde la partida de mi marido y hay tantas habitaciones vacías...-
Ignacio notó que María estaba tan desvalida y continuaron con esa rica charla variada acompañada de unos exquisitos cafés. Ya anochecía y María, por cortesía, lo invitó a quedarse a cenar y a dormir, él de muy buen agrado le dijo que sí.
Ella contenta se dispuso a hacer una rica cena, acomodo en la mesa unas lindas velas, miro que nada faltara, estuvo presente en cada detalle mientras le dijo a él que si quería se podía dar un baño y descansar un poco hasta que la comida este lista.
Volvió a mirar por la ventana, la noche era perfecta acompañada de una hermosa luna brillante. María sonrío y se dio cuenta que esto era real, que posiblemente tenía unas esperanzas.
Cuando todo estaba dispuesto, lo llamó a Ignacio, cenaron, charlaron del pasado y ya cansados se despidieron. Cada uno se fue a su habitación.
Ella dio mil vueltas en la cama y se durmió muy tarde, casi de madrugada, por eso se despertó algo tarde, se levantó muy avergonzada, arreglo su pelo negro, pinto sus labios rojos y salió apurada. Había un gran silencio en la casa, golpeó en la habitación de Ignacio y él nunca contestó. Entonces, se animó a entrar y la cama estaba tendida. María azorada salió hasta las calles y todo estaba vacío. Bajó la cabeza y volvió despacio hacia su casa, se sentó, tomo un café.
De pronto sonó el teléfono, era una de sus amigas:
-¡Hola María! No sabes…tengo un chisme para ti-
María responde:
-Yo también amiga-
Entonces su amiga le comenta:
-¿Te acordás de tu ex novio en la adolescencia?-
-Si- Dijo María.
-Bueno, murió anoche. Me acaba de contar Alicia.-
María totalmente desorientada le responde:
-¿Eh? Eso no puede ser, si él anoche estuvo aquí, junto a mí, en mi casa.-
Su amiga preocupada le dice:
-No María, no puede ser. Él murió en un accidente…-
-¿Cómo fue? ¿A qué hora? ¿Dónde?- Le pregunta María con voz angustiada.
Su amiga le responde:
-Fue camino a Córdoba, viajaba junto a su familia…
María sin palabra alguna, cortó el teléfono, se sentó y lloro sin comprender porque otra vez la muerte le había jugado semejante pasada…


miércoles, 23 de enero de 2013

LLuvia...

Se desliza por una hoja.
Se desliza por los rostros.
En el silencio solo se escucha el tintinear de ella.
Va mojando la tierra,
las aceras ennegrecidas.
Cae en un día de sol
o en día gris como el de hoy.
Algunos miran el cielo y agradecen,
otros lloran sus pérdidas.
Aguaceros que se llevan todo.
Llovizna que moja un rostro enamorado.
Ya las princesas no existen,
los caballeros con espadas tampoco.
En este mundo apurado, nadie se para a mirar como llueve.
En este mundo apurado, lastiman las letras y mi pluma es un puñal.
No te miran a los ojos.
¿Dónde quedó la lluvia de Fred Astaire?
Quizás ella quedó guardada en un corazón
de niña quinceañera
y regresó a un mundo falso.
Escarchado, apurado por llegar
a famas sin misericordias.
No pudo entender.
Quizás son versos tristes,
quizás sus estrofas se apaguen con ella. 
Los pájaros trinan bajo la lluvia.
la vida continua…
¡Que húmedo que esta el día!.
El sol se apagó con tu mirada
y no llegaste a entenderla …

ALASBLANCAS♥

http://www.youtube.com/watch?v=4wKB2G6DQYc